Con perspectiva es como se saborean mejor los éxitos y, en este caso, queremos compartir el éxito que se lograba el pasado 12 de abril con motivo de la premier de este concierto sinfónico y escénico, singular y proyecto único que sirve para rendir pleitesía a un artista total como lo es Tino Casal.
Porque compartidos, los éxitos saben, claro está, mucho mejor. Así que aprovechamos para dar las gracias a Cosme Marina que tuvo la brillante idea de recomendar a César Álvarez para llevar la batuta de la orquesta Oviedo Filarmonía. Y a este, que sugirió la figura de Pedro Contreras como la ideal para escribir los doce arreglos orquestales -en tiempo récord- además de una fantástica obertura que conforman el grueso del repertorio. Lo cierto es que le debemos la vida a Pedro en esta aventura porque no sólo ha escrito unas partituras excelentes sino que se ha entregado en alma y en piel.
A la orquesta, que ha sabido dar lo mejor de sí, y a todo el equipo que la constituye fuera del escenario (Beatriz, María, etc).
Muy agradecidos a Gam (Pablo, etc), a Alquisón, a Edu Movusic, a Fernando Arias y a César Ibarretxe por haber logrado un sonido tan espectacular.
Mención aparte para el grande Luis Antonio Suárez en la dirección de arte, el cual ha concebido una escena pulcra, sobria y tan Casal. Ha sido un placer trabajar con usted.
Fantástico el tratamiento en los visuales de FIUM que aportan la estética contemporánea que buscábamos.
Maravilloso y generoso Rodrigo Cuevas interpretando los textos que loaban a Tino como, sin duda, se merece.
Muchas gracias a la familia Casal, que nos ha puesto todas las facilidades, y nos ha dado todo el apoyo.
Mención especial para Warner (Charly y Javier), porque sin su apoyo, este proyecto no hubiera sido posible. Y por supuesto al ingeniero Jesús Gómez, que resucitó la voz de Tino de los multipistas con un resultado soberbio.
Agradecidos y mucho a la Fundación de Cultura de Oviedo y a su presidente porque, por vez primera, hemos tenido los medios para poder coordinar un proyecto de esta envergadura en casa y además, sirviendo como apertura de los actos del 125 aniversario del Teatro Campoamor.
Ha sido un trabajo complejo, que nos ha hecho sudar porque sí que ha habido contratiempos en la andadura pero, a la postre, hemos llegado al puerto que en su momento vislumbramos para hacer un homenaje honesto imbuido por el espíritu Casal. Muchas gracias a todos, y muchas gracias al numeroso público que, pensamos, disfrutó de lo lindo.
